77 años tuvieron que pasar para que un británico volviera a ganar Wimbledon. 77 años hace que Fred Perry ganó Wimbledon, y, ayer 7/7, casualidad o no, Andy Murray consiguió ganar el Grand Slam en su casa. Antes de llegar a la final, estuvo a punto de perder contra un increíble Fernando Verdasco, que con dos bolas de "break" que tuvo en el cuarto set, estuvo a punto de dar la campanada en la parte difícil del cuadro. Esa en la que estaban Nadal y Federer, que se presentaba muy dura a partir de semifinales. Pero en la primera semana, o mejor dicho, en los tres primeros días, el cuadro se le ponía mas fácil, ya que tanto Rafa, como Federer estaban apeados del cuadro. En cuartos, contra Verdasco tuvo que remontar dos sets, para acabar ganando. Y en semis venció al polaco Janwociz, donde se sobrepuso a perder el primer set en el "tie break".
Por la otra parte del cuadro, Djokovic llego a la final después de ganar sin complicaciones a Berdych en cuartos y tras, para muchos el partido del torneo, la semifinal contra Del Potro, el cual venia de ganar en cuartos al español y a día de hoy numero tres del mundo.
La verdad, que aunque se le pusiera fácil a Murray su parte del cuadro, la presión al tenerlo mas fácil y de tener la mejor oportunidad de que un británico volviera a ganar el Grand Slam de hierba.
En la final, Andy Murray no tuvo compasión, y tras ganar el primer set y remontando en el segundo, consiguió vencer al serbio en tres set. Cuando termino el partido, Murray no sabia donde estaba, en la ceremonia tras preguntarle como recordaba el ultimo punto, contesto que no sabia, que de la emoción no era capaz de recordar el ultimo juego. Así, después de 77 años, un británico volvía a ganar Wimbledon.
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